EL SUTEP UNIDO DEBE VOLVER A LA LUCHA
En aplicación de la ley de
Reforma Magisterial 6 mil maestros han sido invitados a la jubilación sin previa
consulta, y se ha iniciado la separación selectiva de dirigentes y activistas con
diversos pretextos; mientras el MINEDU anuncia exámenes de “ascenso” en octubre
como un paso previo a las evaluaciones de preparación.
Esto ocurre en un momento en que
la ofensiva general del gobierno de Humala ha desencadenando una ola de luchas,
entre ellas de nuestros hermanos estatales y de los estudiantes universitarios,
que recorre todo el país, abriendo una situación favorable para que los
maestros retomemos la lucha por la derogatoria de la LRM y por recuperar
nuestros derechos vulnerados.
Demagógicamente el CEN del SUTEP
habla ahora de la posibilidad de llevar a cabo un Paro Nacional, y el CONARE de
reiniciar su huelga nacional indefinida. Pero ninguno trabaja realmente para que
los maestros volvamos a la lucha. Y aunque lo hicieran, por sus políticas burocráticas
y divisionistas lo cierto es que ninguno tiene posibilidades de alcanzar el éxito.
Además, ambos se encuentran enfrascados en diversas demandas legales alentando la
falsa idea de que por ese camino se logrará cautelar nuestros derechos.
Ante este panorama no es extraño
que la inmensa mayoría de los maestros de base se preparen para el examen de
octubre, aspirando a un ascenso y a una mejora salarial, camino a adecuarse a
la nueva normativa.
La “lucha legal”
Se han presentado varios recursos
contra la LRM y algunas han sido admitidas, entre ellas, la más importante es
la seguida por 36 congresistas encabezados por Yonhy Lescano que demanda la inconstitucionalidad de un grupo de artículos
por vulnerar nuestros derechos.
Este es un importante punto de
apoyo, pero es de corto alcance ya que los próximos meses el Tribunal
Constitucional emitirá sentencia aceptando o rechazando la demanda, y aún si esta
fuera favorable sólo se procedería a un pequeño remiendo de la ley con lo que se
mantendría en pie lo esencial de la norma.
Los abogados del CONARE, por su
parte, anuncian que irán hasta el final en sus demandas (la Corte
Interamericana de Derechos Humanos), sin advertir que esto costará mucho y
durará varios años, y no impida que la ley se siga aplicando.
En cuanto a la acción de amparo
seguida por un sector de maestros, se repite la misma película engorrosa y
pesada de la demanda por el 30% por preparación de clases: Después de un largo
proceso hoy sólo algunos de los miles de colegas que ganaron la demanda cobran
el 30%, mientras la inmensa mayoría se ha quedado en los trámites o con la
sentencia en mano.
Esta es la verdad: Contra el Estado no basta la razón legal
sino es decisiva la lucha para arrancar lo que nos corresponde. Por ello el
tema principal que debemos discutir en cada base y sector es cómo hacemos para
retomar la lucha, esta vez contra la LRM y su Reglamento.
Retomar la lucha en forma unitaria
Organizados en las bases mediante
asambleas, los maestros debemos exigir a nuestras dirigencias nacionales la
convocatoria de un Paro Nacional con vistas al reinicio de la Huelga Nacional,
en unidad con todos los sectores del magisterio. Tanto la parálisis
conciliadora del CEN del SUTEP como el aventurerismo de la cúpula del CONARE
que proclama con un halo aventurero el pronto “reinicio de la huelga nacional”,
no son lo que esperan los maestros de base. Precisamente una de las lecciones
del fracaso de la lucha del año pasado fue la división y el burocratismo de las
cúpula
s que dirigen al magisterio.
Para retomar la lucha unitaria hoy
tenemos un punto de apoyo en la demanda del congresista Lescano, la que debe
ser acompañada por la lucha de masas a fin de que el Congreso y el gobierno nos
escuchen.
En el camino hacia la lucha
mancomunada, los maestros debemos movilizarnos unidos este 4 de julio en el
marco de la Jornada Nacional convocada por la CGTP. Es una acción de los
trabajadores y el pueblo pobre contra el gobierno de Humala y por sus
reivindicaciones, y nada justificaría que el CONARE, por puro sectarismo, se abstuviera
de participar, como siempre lo ha hecho en nombre de un falso “clasismo”.
Por supuesto, el CEN del SUTEP no
asegura nada: ni el Paro, ni la vuelta a la huelga, ni la defensa de nuestros
derechos; como tampoco los garantiza la cúpula del CONARE.
Por ello está en mano de las
bases el desafío de organizarnos y tomar decisiones sobre el futuro de la lucha
magisterial. Organizarnos en cada sector debemos demandar la unidad para retomar
la lucha ahora contra la LRM. Y si esta se da, para que podamos tomar el
control de la lucha y no nos vuelvan a traicionar.
En este proceso los docentes más
avanzados necesitamos poner en pie una alternativa de dirección clasista y
democrática, opuesto a Patria Roja y a los grupos que dirigen el CONARE que son
los responsables de la actual situación de retroceso que vive el magisterio,
para retomar la tarea de reorganizar nuestro gremio como instrumento de lucha
de todos los maestros.
Junio 2013